Proponen que 2024 sea el Año del Bicentenario de Coahuila

Entrega Raúl López Gutiérrez la Iniciativa popular en el Congreso

El Patronato del Museo de los Presidentes Coahuilenses propuso al Congreso del Estado declarar el 2024 como el “Año del Bicentenario de Coahuila; 200 Años de Grandeza”.

Raúl López Gutiérrez, presidente del patronato, entregó la iniciativa popular en el Poder Legislativo, donde fue atendido por una comisión encabezada por la diputada Luz Elena González.

En la exposición de motivos se indica que el 7 de mayo de 1824, el Congreso General Constituyente de los Estados Unidos Mexicanos expidió el decreto número 43, en cuyo numeral segundo establece como Estado de la Federación a Coahuila y Tejas.

“Hace 200 años se instituye como parte integrante de la federación mexicana nuestro actual Estado Libre, Independiente y Soberano de Coahuila de Zaragoza”, indica el documento.

Como antecedente se hace mención que el Congreso Constituyente del Estado aprobaría su Constitución Política el 11 de marzo de 1827, fecha en que fue promulgada por el gobernador José Ignacio de Arizpe.

Por cierto, este ordenamiento, que consta de 225 artículos, fue publicado en español e inglés -para que pudiese ser entendido por algunos habitantes anglosajones del entonces Tejas-, prohibió la esclavitud, estableció el gentilicio “coahuiltejanos” y como objeto del gobierno “la felicidad de los individuos”.

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ALGUNOS HÉCHOS HISTÓRICOS:

Coahuila, ha jugado un papel fundamental en la vida histórica de México, es aquí donde el Padre de la Patria Miguel Hidalgo, encontró cobijo en los aciagos días de la Guerra de Independencia, tras la derrota de Puente Calderón.

Fue en Saltillo, el 13 de marzo de 1811, cuando Miguel Hidalgo y los jefes insurgentes rechazaron el perdón del Virrey: “…el indulto es para los criminales, no para los defensores de la patria…”.

Fue también aquí en donde Ignacio Allende asumió formalmente el mando insurgente; lamentablemente en “Norias de Baján”, en el hoy municipio de Castaños, el 21 de marzo de 1811, ante la traición de Elizondo, que los principales caudillos fueron aprehendidos y tras largo peregrinar por tierras Coahuilenses serían fusilados en Chihuahua.

La lucha continuaría en sus diversas etapas y en ella participó decididamente el Coahuilense Melchor Múzquiz, quien al triunfo de la Independencia entró triunfalmente a la Ciudad de México con las fuerzas del Ejército Trigarante e Iturbide.

Fue también en Saltillo en donde entre el 1 y 2 de junio de 1821 se proclamó y juró la Independencia Nacional, primera población del septentrión novohispano en la que se llevó a cabo tan significativo acontecimiento, inclusive más de 100 días antes de que se hiciera en la Ciudad de México.

En el surgimiento de México como República un hijo de Coahuila, Don José Miguel Ramos Arizpe, quien había representado dignamente a la Provincia en Cádiz, propició que nuestra patria acogiera al federalismo como forma de gobierno, sistema vigente hasta nuestros días.

Melchor Múzquiz, originario de Santa Rosa, Coahuila, es designado Presidente de México en 1832, en momentos trascendentes para la vida de nuestro joven país; asumió la responsabilidad con un alto sentido de honor, patriotismo y honestidad. Hoy su municipio natal se denomina “Múzquiz” para honrar su memoria.

Y fue también en la Reforma y la República cuando Coahuila y sus hijos demostraron su lealtad a Benito Juárez; fue en enero de 1864 cuando él y su familia encontraron en la entidad tierra propicia y hospitalaria para declararla sede de su gobierno. Y desde aquí el Benemérito decretó el 26 de febrero de 1864 la separación de nuestro Estado del de Nuevo León y con ello nos devolvió la soberanía que nos había sido arrebatada en 1856. Además, Juárez encomendó a los Coahuilenses el Archivo de la Nación, que en la “Cueva del Tabaco” en el actual municipio de Matamoros fueron resguardados día y noche, con un gran celo y responsabilidad.

En 1910 cuando Madero inicia la Revolución Mexicana, una gran lucha que costó la vida a miles de mexicanos que tomaron las armas para sumarse al coahuilense y que triunfaría 6 meses después con el derrocamiento de Porfirio Díaz y la celebración de elecciones democráticas.

Ante la traición a Madero y su trágica muerte, Coahuila marcó el rumbo nuevamente y desde aquí el gobernador Venustiano Carranza y el Congreso desconocieron la usurpación, llamaron a las armas y crearon el Ejército, nuestro actual Ejército Mexicano. “Ahora hablarán las carabinas” sentenciaría Don Venustiano desde el balcón del Palacio de Gobierno y así fue.

Con el plan proclamado en la “Hacienda de Guadalupe”, en Ramos Arizpe, se dio cauce a la lucha armada e inició la Revolución Constitucionalista, a la que se sumaron miles de mexicanos de todos los rincones de la patria y nuevamente los coahuilenses empuñaron los fusiles y lucharon al lado de Carranza para conquistar el triunfo en agosto de 1914.

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