El 22 de junio, autoridades de la Fiscalía General del Estado descubrieron un cuerpo en estado avanzado de descomposición cerca del Ejido Ramírez en Progreso. Tras el levantamiento del cadáver y su traslado a una funeraria local, la necropsia reveló que la causa de la muerte fue una laceración hemorrágica cerebral bilateral, resultado de un proyectil de arma de fuego cuyo calibre aún se investiga. Debido a la falta de identificación del cuerpo, se ha iniciado una investigación para determinar la identidad de la víctima.
