En la zona centro del municipio de Sabinas, Coahuila, se encuentra la cafetería «Gardenias», un lugar acogedor donde familias y amigos disfrutan de un buen café o de un delicioso desayuno.
Entre las mesas y el aroma a café recién hecho, destaca una joven de 19 años con una sonrisa permanente y una energía contagiosa: Crystal Flores Gurrola.
Crystal trabaja en la cafetería junto a su hermana Luz. Ambas atienden a los clientes con esmero, pero lo que diferencia a Crystal es su inquebrantable sueño de convertirse en Médico Veterinaria.
Originaria de Sabinas, Crystal ha presentado el examen de admisión en la Universidad Autónoma Agraria «Antonio Narro» en Torreón, Coahuila, con la esperanza de iniciar su camino hacia una carrera que la apasiona desde niña.»Desde pequeña me cuentan que utilizaba mis juguetes para simular que era doctora», comenta Crystal con una sonrisa. «Al principio pensé en estudiar medicina, pero finalmente me incliné por la veterinaria. Amo a los animales y quiero dedicar mi vida a cuidarlos».
Su familia, compuesta por sus padres y tres hermanos, la apoya incondicionalmente. Sin embargo, es su propia determinación lo que la impulsa a no rendirse. «Es la segunda ocasión que aplico a la universidad, pero no significa que voy a desistir. Seguiré hasta hacer realidad mi sueño de convertirme en Médico Veterinaria», afirma con convicción.La vida de Crystal no se limita solo a su trabajo en la cafetería y su aspiración académica. También ha dedicado tiempo a estudiar inglés, con la visión de que dominar el idioma le abrirá puertas en el futuro. «Quizás tenga la oportunidad de trabajar en el extranjero y el inglés es muy necesario», explica Crystal.Agradecida por el apoyo que recibe de sus jefes, Jorge Cárdenas Garza y su esposa, Crystal se siente motivada a seguir adelante. «Ellos me han dicho que no deje de luchar por mis anhelos y que si mi deseo es convertirme en médico veterinario, que lo haga sin dudarlo», comparte.Crystal Flores Gurrola es un ejemplo de perseverancia y pasión. En cada taza de café que sirve, en cada sonrisa que brinda a los clientes, se refleja su compromiso y dedicación hacia sus metas. Su historia es una inspiración para muchos jóvenes que, como ella, luchan por alcanzar sus sueños a pesar de las adversidades.Mientras Crystal continúa su jornada en la cafetería «Gardenias», su mirada está puesta en el futuro. Un futuro donde, con esfuerzo y determinación, se ve como una exitosa Médico Veterinaria, cuidando y salvando a los animales que tanto ama.